jueves, 4 de octubre de 2012

El chico de la fotografía

Un día de otoño, uno de esos normales, donde las hojas caen,el cielo está nublado,  el día gris y el mejor plan que se le puede ocurrir a uno preparase un buen café  y  quedarse mirando películas yankees como Tienes un e-mail  o algo de ese tipo..
Todo parecia normal,este plan tendria que pasar a otro dia,pues las exigencias mandan,uno es humano y debe cumplir con las tareas que le tocan o el rol que cumple.
Gisela prepara su muchila,busca su carpeta y se asegura tener bien sus horarios antes de salir de casa. Se dirigia hacia su trabajo, en la biblioteca del centro. Con el transcurso del tiempo, esta actividad o "profesión" que habia adquirido gracias a una antigua bibliotecaria del lugar donde trabaja actualmente,que al verla todas las semana en busca de libros para su profesorado, le propuso este trabajo, de bibliotecaria, no ganaría "laaaaa plata" pero no esta nada mal el pago considerando las actividades que debia realizar alli dentro, buscar los libros que los socios necesitaban, llenar formularios, estar en la computadora,nada de otro mundo. Al principio Gisela habia comenzado con la mejor predisposición pero claro, la rutina no era presisamente una de las cosas que mas le agradaban a la joven. Pero si habia algo que definitivamente si le gustaba y llenaba y apartaba de su mente los estudios, y inquebrantable rutina del dia a dia, eso era la fotografia, si bien aun no habia ahorrado lo suficiente como para coprarse la camára nueva, esa que habia visto en una pagina de internet y que tanto anhelaba, tenia una antigua camara,obsequio de su abuela María, que se la habia entregado antes de fallecer y le habia dicho: _" Gisela,mi nieta,sabés cuanto te quiero.. todos sabemos que no me queda mucho tiempo en este mundo,pero si hay algo que quisiera que tuvieras vos, algo que representara  un pedasito de mi,es esta camara.. eh visto como  ultimamente te pasas horas viendo antiguos albunes de fotos y me comentas lo mucho que te gustaria ser una gran fotografa,asique supongo lo mejor que puedo dejarte antes de partir es este pequeño obsequio, espero la sepas cuidar muy bien, porque predigo que esta misma camara,es la que te llenara y tapará todas esas pensas que sientas en el corazón y ademas quien sabe, a lo mejor te trae alguna que otra sorpresita jeje.. cuidala corazon"
Esas fueron las palabras de la abuela Maria hacia su nieta Gisela, la joven no olvidaba esas palabras, asique siempre andaba con su camara por todos lados, fotografiando desde hermososo paisajes, hasta las cosas mas simples que se pueden imaginar.

Este dia, el dia de invierno, Gisela luego de recoger sus cosas y marchar hacia la parada  de colectivos